Abrazar nuestras debilidades, dolor profundo, vulnerabilidad, sin avergonzarnos y aceptándonos y amándonos tal cual somos. Eso es lo que nos hace libres.
Así que me pieza a bendecir esa tonta mente humana que te acompaña con sus ideas condicionadas, sus estándares imposibles, sus intentos infinitos de decirnos cómo deberíamos ser, pensar o sentir. Obsérvala y reconócela sin dejarte absorber por ella.
Deshazte de los ideales que mandan a tantos a la tumba temprana de pasar por aquí muertos en vida.
Protege, cuida y escucha a tu niño interior, deja que exprese lo que tenga que expresar y deja de decirle cómo debería ser, tus ideales no le importan, solo quiere que le ames de corazón. Protégelo de todas las fuerzas del mundo que buscan dañarlo y silenciarlo. Y cuando te pregunte si debe ser feliz y perfecto para que le ames déjale saber que no, qué le amas exactamente cómo es, con sus imperfecciones, debilidades y vulnerabilidades, todo él es hermoso tal y como es.
Esta bien no sentirse en paz a veces, sentirse perdido, enfadado con el mundo, es parte del proceso, de este paseo por la vida, solo hay que saber verlo, aceptarlo y no intentar luchar contra la naturaleza humana. Eso es la felicidad, la libertad de ser lo que de verdad somos. 🙏🏼✨